16 de enero de 2011

OTRO TESTIMONIO DESDE CUBA SOBRE LA VISITA DE LA VIRGEN PEREGRINA

Con alegría hemos recibido más escritos y fotos desde Cuba sobre el paso de la Virgen Peregrina. Iremos poniendo estos comentarios poco a poco (para no tocar siempre el mismo tema). Lo que más nos alegra es la disposición de hermanos en Cuba a compartir con todos nosotros sus experiencias y testimonios. Esa es una de las motivaciones centrales de nuestro blog: reflejar el sentir de los católicos "de a pie".



TESTIMONIO “VEN CON NOSOTROS A CAMINAR”


(Enviado por Ventura Julio Soler Bert. Manzanillo, Cuba, 16 de enero de 2011.
Fotos de Salvador, tomadas en recorridos por campos cercanos a Manzanillo). 

No pretendo escribir un artículo periodístico, de hecho no tengo ese don, sólo quiero compartir un pequeño testimonio sobre lo ocurrido en mi pueblo Manzanillo durante la visita de la imagen de la Virgencita de la Caridad.


Para mí fue algo indescriptible, parecía que mi sueño se hacía realidad, cuánta espera, cuánto tiempo de forzado silencio, de restricciones y marginaciones, y de momento poder contemplar a la imagen de la Patroncita de Cuba en medio de una calle, custodiada y seguida por el pueblo, cuantas peticiones, cuantas personas dando gracias, cuantas esperanzas depositadas en la Santa Madre para llevar a su hijo muy amado. Que libre me sentí, poder compartir con mis hermanos de diferentes creencias sus anhelos sus oraciones que sólo Dios sabe.



A mi memoria vinieron tantos recuerdos que no pude contener las lágrimas, sentí presente a familiares y amigos que hoy se encuentran en la casa del Padre, amigos que son más que eso, son nuestra familia, y hoy se encuentran viviendo en otros países por diferentes motivos, enfermos, presos, necesitados, ancianos sin familias o abandonados por ellas. Recordé el tiempo de total marginación por ser creyentes, tiempo que desde luego hizo que nuestra fe aumentara y nuestra comunidad se mantuviera viva en medio de tanto ateismo.



Al escuchar y ver el homenaje ofrecido por prestigiosos artistas de nuestro pueblo con ese respeto y admiración hacia la querida madrecita, de verdad, parecía un sueño, pero de él desperté a la realidad entonces pude apreciar un verdadero fervor de fe y confianza en la bendita imagen y comprendí cuantas cosas se depositaban en sus manos, cuanta esperanza y aspiraciones, entonces de forma categórica lo consideré como un signo patente de que algo grande nos quería decir la morena y le dije “Ven con nosotros a caminar”, acompáñanos madre querida que pronto tendremos el beneficio de nuestras peticiones. Y al ver una buena parte del pueblo manzanillero venerando la imagen de la mambisa me dije: es una realidad, La Caridad nos une, en ella depositamos todas nuestras esperanzas y sueños y llévanos a Jesús tu amadísimo hijo.

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